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Trucos y consejos para cuidar nuestro bien más preciado: El Agua
¿Es infinita el agua? Ojalá… Pero no. El agua es un recurso limitado en nuestro planeta y necesitamos cuidarla y no malgastarla para poder seguir disfrutando de este recurso indispensable en nuestra vida.
Cuando abrimos un grifo y sale agua potable, debemos darnos cuenta de la suerte que tenemos. Actualmente, las cifras asustan: uno de cada cuatro habitantes del planeta carece de agua potable. Es por esto que hoy te traemos cuatro trucos muy prácticos para ahorrar agua y hacer un uso mejor y más sostenible de ella.
4 maneras de ahorrar agua
MEJOR A LA DUCHA… Y NO A LA BAÑERA. ¡La bañera gasta hasta 15 veces más que el agua de la ducha! Así que cuando llegues cansado a casa y quieras agua calentita, mejor elige la ducha pero ojo… no la alargues demasiado. Después de un primer enjuague, es recomendable que cierres el grifo, te enjabones y lo vuelvas a abrir para aclararte.
EL LAVAVAJILLAS Y LA LAVADORA…¡HASTA ARRIBA! Sí, asegúrate de que llenas del todo el lavavajillas y la lavadora cada vez que los vas a poner en marcha. Pues la OCU recuerda que lavar los platos dos veces al día oscila entre los 120 litros si se hace a mano con el grifo abierto o 60 litros si se utiliza la pila llena de agua. Sin embargo, poner el lavavajillas (lleno), una vez al día, consume 25 litros de agua.
¡CUIDADO CON EL INODORO! Hay que tener muy en cuenta que el inodoro no es una papelera, pues cada vez que arranca la cisterna gastamos entre nueve y diez litros de agua, a veces simplemente para tirar un papelito. Así que mejor colocar una papelera en el baño y usar solo el inodoro cuando sea necesario.
¡EL GRIFO NECESITA REVISIÓN! El grifo nos encanta en Griffo pero… mejor que esté cerrado el mayor tiempo posible. Desde la OCU, aconsejan utilizar un grifo eficiente y recuerdan a los usuarios que pueden comprobarlo de manera sencilla: hay que dejar el agua correr durante medio minuto y si en este tiempo, recoges más de cuatro litros, se trataría de un grifo “derrochador”.
Ahora sí, es hora de poner en marcha estos cuatro trucos tan sencillos para ahorrar nuestro recurso más preciado: el agua. Ese recurso que en Griffo amamos tanto y nos gusta tanto cuidar. Hasta el próximo blog y mientras tanto…¡a ahorrar mucha agua!