Receta del agua perfecta
El agua perfecta es un concepto muy personal y depende de cada persona. Sin embargo, esa sustancia que necesitamos para vivir y mantenernos hidratados, es fundamental para nuestro bienestar. Este componente está presente en nuestra vida diaria, pero ¿alguna vez te has preguntado qué características debe tener el agua para ser de calidad y asegurar una correcta hidratación? Aquí te lo contamos:
El agua perfecta – su composición
Siempre depende del tipo de agua que bebas y de dónde provenga. En España o en Europa tenemos la suerte de que, por lo común, es seguro beber agua de la red municipal. Sin embargo, debes tener cuidado si bebes agua de un pozo o una fuente. Si no hay una señal clara que confirme que el agua es potable, recomendamos usar el agua solo para refrescarse pero no para beber.
El agua, además de tener H2O, puede contener muchos componentes secundarios invisibles para nuestros ojos como minerales, y otros que es preferible que no tenga como metales pesados, nitratos, sulfatos, sílice, microplásticos, contaminantes emergentes, bacterias o virus. Lee más sobre esta tema en blog que cuenta de esta tema má en detalle.
Entonces, ¿cuál es la receta del agua perfecta?
Calidad del agua en España
Como hemos comentado anteriormente, en España es seguro beber agua de la red municipal, pero en muchas áreas el sabor del agua está lejos de ser perfecto. La razón detrás de esto varía en cada zona. Hay áreas con alta actividad agrícola, lo que puede llevar a un mayor contenido de nitratos o fosfatos. Otras áreas pueden tener más minerales. Y otros lugares, más calcio y magnesio, lo que sería “agua dura”, el lado negativo del agua perfecta.
Además, el cloro es importante para el agua potable (para eliminar bacterias y virus), aunque también puede influir en el sabor. Y como ya sabemos tod@s el gusto del agua es un aspecto muy personal. A mí me puede encantar el sabor del agua mineral, pero a mi amigo le puede gustar aquella agua que sabe menos a minerales…Es como los perfumes, es algo muy particular y personal.
Por ello, es todo un reto hablar del concepto de agua perfecta…
Y de hecho, quizás sea contradictorio lo que vamos a decirte, pero…NO EXISTE UN AGUA PERFECTA, aunque sí hay formas de mejorarla y acercarnos a esa “perfección”
Sí, una de las opciones es comprar agua embotellada, lo que ocurre es que hay muchos efectos secundarios que queremos evitar, ya que no hay un planeta B. Por eso, es aconsejable buscar alternativas a las botellas de plástico. Nuestra recomendación es elegir un sistema de filtración para mejorar la calidad del agua potable de la red, reduciendo la concentración de sales y minerales, nitratos, microplásticos, impurezas en suspensión, olores y sabores.
¿Cómo llevar a cabo esta receta de agua perfecta y mejorar la calidad del agua para nuestro bienestar y adecuada hidratación? ¡Lo abordaremos en los próximos artículos!