Comprar agua envasada es caro y poco sostenible.
Cuesta 300 veces más que la del grifo y no es más saludable.
En Griffo queremos acabar con botellas y bidones de agua, y los trayectos por carretera para transportarla.
Nuestra soluciones purifican el agua de red sin necesidad de envases ni transporte, lo que supone mayor comodidad, ahorro económico y un 80% menos de emisiones.